No digas que fue otro sueño
Y entre las tinieblas de aquel lugar santificado por los siglos, él me besó dulcemente y dijo: "En esta vida tuya, en esta larga noche de contar los años quiero un lugar para mí. Que la eternidad sea para los dos o no sea de ninguno".
Terénci Moix.
Etiquetas: La morada del Ka de Ptah 7 pecados
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